Misterios Dolorosos

Misterios dolorosos

Los Misterios Dolorosos son la segunda serie de cinco misterios en la oración católica del Rosario y se centran en la Pasión de Jesucristo. Estos misterios se rezan los martes y viernes. Los Misterios Dolorosos son los siguientes:

  1. La Oración de Jesús en el Huerto: Jesús ora en el huerto de Getsemaní antes de ser arrestado (Mateo 26, 36-46).
  2. La Flagelación del Señor: Jesús es azotado por los soldados romanos (Juan 18,36-38; 19,1).
  3. La Coronación de Espinas: Jesús es coronado con espinas y burlado por los soldados (Marcos 15,14-17).
  4. Jesús con la Cruz a Cuestas: Jesús carga con la cruz camino al Calvario (Lucas 23,26-32).
  5. La Crucifixión: Jesús es crucificado y muere en la cruz (Lucas 23,33-46).

Al rezar los Misterios Dolorosos, se busca meditar en el sufrimiento y sacrificio de Jesús durante su Pasión. Cada misterio se acompaña de la recitación de un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria, mientras se reflexiona sobre el significado y las lecciones de cada evento en la vida de Jesús.

🔊 Formato Audio de Los Misterios Dolorosos:

1. La oración en el Huerto, agonía de Jesús en Getsemaní (Agonia in Hortu)

«Entonces Jesús fue con ellos a un huerto, llamado Getsemaní, y dijo a sus discípulos: «Sentaos aquí mientras voy a orar». Y tomando consigo a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a sentir tristeza y angustia. Entonces les dijo: «Mi alma está triste hasta el punto de morir; quedaos aquí y velad conmigo». Y adelantándose un poco, cayó rostro en tierra, y suplicaba así: «Padre mío, si es posible, que pase de mí esta copa, pero no sea como yo quiero, sino como quieras tú»»

«Este combate y esta victoria sólo son posibles con la oración. Por medio de su oración, Jesús es vencedor del Tentador, desde el principio y en el último combate de su agonía»

2. La flagelación de Jesús atado a la columna (Flagellatio)

«Pilato entonces tomó a Jesús y mandó azotarle.»

«Los padecimientos de Jesús han tomado una forma histórica concreta por el hecho de haber sido «reprobado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas» (Mc 8, 31), que lo «entregaron a los gentiles, para burlarse de él, azotarle y crucificarle» (Mt. 20, 19).»

3. La imposición de una corona de espinas sobre la cabeza de Jesús (Coronatio Spinis)

«Entonces los soldados del procurador llevaron consigo a Jesús al pretorio y reunieron alrededor de él a toda la corte. Lo vistieron con un manto púrpura y, trenzando una corona de espinas, se la pusieron sobre la cabeza, y en su mano derecha una caña, y doblando la rodilla delante de él, le hacían burla diciendo: «Salve, Rey de los judíos»».

«El amor hasta el extremo es el que confiere su valor de redención y de reparación, de expiación y de satisfacción al sacrificio de Cristo. Nos ha conocido y amado a todos en la ofrenda de su vida.»

4. Jesús con la cruz a cuestas camino del Calvario (Baiulatio Crucis)

«Y obligaron a uno que pasaba, a Simón de Cirene, que volvía del campo, el padre de Alejandro y de Rufo, a que llevara su cruz. Lo condujeron al lugar del Gólgota, que quiere decir de la «Calavera».»

5. La crucifixión y muerte de Jesús (Crucifixio et mors)

«Llegados al lugar llamado «La Calavera», le crucificaron allí a él y a los dos malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. Jesús decía: «Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen»… Era ya eso de medio día cuando, al eclipsarse el sol, hubo oscuridad en toda la tierra hasta la media tarde. El velo del Santuario se rasgó por medio y Jesús, dando un fuerte grito dijo: «Padre, en tus manos pongo mi espíritu» y dicho esto, expiró.»


Los Misterios Dolorosos

Los Misterios Dolorosos son una parte importante de la oración católica del Rosario. Estos misterios nos invitan a meditar y reflexionar sobre los momentos de sufrimiento y dolor en la vida de Jesús. Son cinco misterios que nos ayudan a profundizar en el amor redentor de Dios hacia nosotros.

El primer misterio doloroso es la Oración en el Huerto. En este misterio, Jesús se encuentra en el Monte de los Olivos, angustiado y lleno de tristeza, orando al Padre antes de su arresto y crucifixión. Este misterio nos enseña la importancia de la oración y la entrega confiada a la voluntad de Dios en momentos de dificultad.

El segundo misterio doloroso es la Flagelación de Jesús. En este misterio, Jesús es azotado cruelmente por los soldados romanos. Su cuerpo es herido y maltratado por nuestros pecados. Este misterio nos invita a reflexionar sobre el sufrimiento que Jesús soportó por nuestra salvación y nos llama a la conversión y al arrepentimiento.

El tercer misterio doloroso es la Coronación de Espinas. En este misterio, Jesús es coronado con espinas y burlado por los soldados romanos. Su humillación y sufrimiento son evidentes. Este misterio nos recuerda la importancia de reconocer a Jesús como nuestro Rey y Señor, y nos desafía a ser valientes en nuestra fe, incluso en medio de la persecución.

El cuarto misterio doloroso es el Camino al Calvario. En este misterio, Jesús carga con la cruz hacia el lugar de su crucifixión. Su camino está lleno de dolor y agotamiento. Este misterio nos invita a reflexionar sobre el peso de nuestras propias cruces y a seguir a Jesús con valentía y perseverancia.

El quinto misterio doloroso es la Crucifixión y Muerte de Jesús. En este misterio, Jesús es clavado en la cruz y muere por nuestros pecados. Su sacrificio nos ofrece la redención y la esperanza de la vida eterna. Este misterio nos llama a contemplar el amor infinito de Dios y a responder con gratitud y entrega a su sacrificio.

Los Misterios Dolorosos del Rosario nos invitan a unirnos al sufrimiento de Jesús y a encontrar en él la fuerza y la esperanza para enfrentar nuestras propias dificultades. A través de la meditación de estos misterios, podemos experimentar la misericordia y el amor de Dios de una manera profunda y transformadora.

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