LECCIONARIO V. 29 de diciembre. Santo Tomás Becket, obispo y mártir
Lecturas Santo Tomás Becket, obispo y mártir.
El 29 de diciembre, la Iglesia Católica celebra la memoria de Santo Tomás Becket, obispo y mártir. Santo Tomás Becket fue un hombre valiente y comprometido con la defensa de la fe y la autonomía de la Iglesia frente a los poderes seculares.
Nacido en Inglaterra en el siglo XII, Tomás Becket se convirtió en canciller del rey Enrique II de Inglaterra, un amigo cercano y confidente del monarca. Sin embargo, su vida cambió drásticamente cuando fue nombrado arzobispo de Canterbury, la máxima autoridad de la Iglesia en Inglaterra.
Como arzobispo, Santo Tomás Becket se enfrentó a un conflicto con el rey Enrique II, quien buscaba ejercer control sobre la Iglesia y sus privilegios. Becket defendió valientemente la independencia de la Iglesia y se negó a someterse a las demandas del rey en asuntos eclesiásticos.
La tensión entre Becket y Enrique II llegó a su punto más crítico cuando el rey pronunció palabras imprudentes que llevaron a sus seguidores a interpretarlas como una orden de eliminar a Becket. El 29 de diciembre de 1170, cuatro caballeros ingresaron a la catedral de Canterbury y asesinaron a Santo Tomás Becket mientras se encontraba orando.
La muerte de Santo Tomás Becket conmocionó a la sociedad de su tiempo y tuvo un impacto duradero en la historia de la Iglesia. Su martirio se convirtió en un símbolo de la lucha por la libertad religiosa y la defensa de la soberanía de la Iglesia frente a los poderes seculares.
La vida y el testimonio de Santo Tomás Becket nos desafían a ser fieles a nuestros principios y a defender la verdad y la justicia, incluso en medio de la adversidad. Él nos enseña que la fidelidad a Dios y a los valores del Evangelio puede exigir sacrificio y enfrentamiento con los poderosos, pero que vale la pena defender la fe y los derechos de la Iglesia.
En la festividad de Santo Tomás Becket, podemos orar por todos aquellos que sufren persecución por su fe y por aquellos que luchan por la libertad religiosa en todo el mundo. Podemos pedir la intercesión de este valiente mártir para que nos dé la fuerza y la valentía necesarias para ser testigos de la verdad en nuestra propia época.
Que Santo Tomás Becket, obispo y mártir, nos inspire a ser fieles a nuestra fe y a defender los valores del Evangelio en todas las circunstancias. Que su ejemplo nos recuerde la importancia de la libertad religiosa y nos anime a trabajar por la justicia y la paz en nuestra sociedad. Amén.
29 de diciembre: Santo Tomás Becket, obispo y mártir
PRIMERA LECTURA
Todo el que se proponga vivir piadosamente en Cristo Jesús será perseguido
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 2, 8-13; 3, 10-12
Querido hermano:
Haz memoria de Jesucristo resucitado de entre los muertos, nacido del linaje de David. Éste ha sido mi Evangelio, por el que sufro hasta llevar cadenas, como un malhechor; pero la palabra de Dios no está encadenada. Por eso lo aguanto todo por los elegidos, para que ellos también alcancen la salvación, lograda por Cristo Jesús, con la gloria eterna.
Es doctrina segura: Si morimos con él, viviremos con él. Si perseveramos, reinaremos con él. Si lo negamos, también él nos negará.
Si somos infieles, él permanece fiel, porque no puede negarse a sí mismo.
Tú seguiste paso a paso mi doctrina y mi conducta; mis planes, fe y paciencia, mi amor fraterno y mi aguante en las persecuciones y sufrimientos, como aquellos que me ocurrieron en Antioquía, Iconio y Listra. ¡Qué persecuciones padecí! Pero de todas me libró el Señor. Por otra parte, todo el que se proponga vivir piadosamente en Cristo Jesús será perseguido.
Palabra de Dios.
Salmo responsorial: Salmo 33, 2-3. 4-5. 6-7. 8-9 (R.: 5b)
R. El Señor me libró de todas mis ansias.
Bendigo al Señor en todo momento,
su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloría en el Señor:
que los humildes lo escuchen y se alegren. R.
Proclamad conmigo la grandeza del Señor,
ensalcemos juntos su nombre.
Yo consulté al Señor, y me respondió,
me libró de todas mis ansias. R.
Contempladlo, y quedaréis radiantes;
vuestro rostro no se avergonzará.
Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha
y lo salva de sus angustias. R.
El ángel del Señor acampa
en torno a sus fieles y los protege.
Gustad y ved qué bueno es el Señor,
dichoso el que se acoge a él. R.
Aleluya y versículo antes del evangelio Mt 5, 6
Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia,
porque ellos quedarán saciados.
EVANGELIO
El que pierda su vida por mí la encontrará
Lectura del santo evangelio según san Mateo 16, 24-27
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
—«El que quiera venirse conmigo, que se niegue a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga.
Si uno quiere salvar su vida, la perderá; pero el que la pierda por mí la encontrará
¿De qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero, si arruina su vida?
¿O qué podrá dar para recobrarla?
Porque el Hijo del hombre vendrá entre sus ángeles, con la gloria de su Padre, y entonces pagará a cada uno según su conducta».
Palabra del Señor.
Lecturas del Leccionario V para el mes de diciembre