LECCIONARIO V. 24 de octubre. San Antonio María Claret, obispo
Lecturas San Antonio María Claret, obispo.
El 24 de octubre, la Iglesia Católica celebra la memoria de San Antonio María Claret, un obispo y fundador de la Congregación de los Hijos del Inmaculado Corazón de María, conocidos como los Claretianos. San Antonio María Claret fue un hombre de profunda fe y celo apostólico, dedicado al servicio de Dios y al anuncio del Evangelio.
Nacido el 23 de diciembre de 1807 en España, Antonio María Claret mostró desde joven una gran devoción y amor a Dios. Fue ordenado sacerdote en 1835 y se destacó por su predicación elocuente y su fervor apostólico. Su capacidad para comunicar la Palabra de Dios de manera clara y persuasiva hizo que fuera muy buscado como predicador y director espiritual.
San Antonio María Claret se convirtió en un misionero incansable, recorriendo España y otros países para llevar el mensaje del Evangelio a las personas. Sus predicaciones eran directas, centradas en la conversión y en la vivencia de una vida cristiana auténtica. También se preocupó por la educación y la formación de los fieles, estableciendo escuelas y promoviendo la alfabetización.
En 1849, San Antonio María Claret fue nombrado arzobispo de Santiago de Cuba. Durante su tiempo allí, trabajó arduamente para mejorar la vida espiritual de su diócesis y para promover el bienestar de los fieles. Fundó escuelas, hospitales y centros de caridad, y se preocupó por la formación de los sacerdotes y religiosos.
Además de su labor pastoral, San Antonio María Claret también fue un escritor prolífico. Escribió numerosos libros y folletos sobre temas espirituales y teológicos, así como sobre la devoción a la Virgen María. Sus obras han sido una fuente de inspiración y guía espiritual para muchas personas a lo largo de los años.
San Antonio María Claret falleció el 24 de octubre de 1870 en Francia, donde se encontraba exiliado debido a conflictos políticos. Fue canonizado como santo por el Papa Pío XII en 1950. Su vida y su obra nos inspiran a vivir nuestra fe con pasión y a ser testigos valientes del Evangelio en nuestro propio entorno.
En la memoria de San Antonio María Claret, podemos reflexionar sobre la importancia de la predicación y el testimonio personal en la tarea de evangelización. Podemos pedir su intercesión para que, al igual que él, podamos ser instrumentos eficaces en la transmisión de la fe y en el servicio a los demás. Que su ejemplo de vida y su amor por Dios y por los demás nos inspiren a vivir con generosidad y entrega total.
San Antonio María Claret, obispo, ruega por nosotros y ayúdanos a ser fieles discípulos de Cristo. Inspíranos a vivir una vida de amor y servicio, y a llevar el mensaje del Evangelio a todas las personas que encontramos en nuestro camino. Que tu ejemplo de santidad nos guíe hacia una mayor unión con Dios y una mayor caridad hacia nuestros hermanos. Amén.
24 de octubre: San Antonio María Claret, obispo
PRIMERA LECTURA
Verán los confines de la tierra la victoria de nuestro Dios
Lectura del libro de Isaías 52, 7-10
¡Qué hermosos son sobre los montes
los pies del mensajero que anuncia la paz,
que trae la Buena Nueva,
que pregona la victoria,
que dice a Sión: «Tu Dios es rey»!
Escucha: tus vigías gritan,
cantan a coro,
porque ven cara a cara al Señor,
que vuelve a Sión.
Romped a cantar a coro,
ruinas de Jerusalén,
que el Señor consuela a su pueblo,
rescata a Jerusalén;
el Señor desnuda su santo brazo
a la vista de todas las naciones,
y verán los confines de la tierra
la victoria de nuestro Dios.
Palabra de Dios.
Salmo responsorial: Salmo 95, 1-2a. 2b-3. 7-8a. 10 (R.: 3)
R. Contad las maravillas del Señor a todas las naciones.
Cantad al Señor un cántico nuevo,
cantad al Señor, toda la tierra;
cantad al Señor,
bendecid su nombre. R.
Proclamad día tras día su victoria.
Contad a los pueblos su gloria,
sus maravillas a todas las naciones. R.
Familias de los pueblos, aclamad al Señor,
aclamad la gloria y el poder del Señor,
aclamad la gloria del nombre del Señor. R.
Decid a los pueblos: «El Señor es rey,
él afianzó el orbe, y no se moverá;
él gobierna a los pueblos rectamente». R.
Aleluya y versículo antes del evangelio Mc 1, 17
Venid conmigo
—dice el Señor—
y os haré pescadores de hombres.
EVANGELIO
Os haré pescadores de hombres
Lectura del santo evangelio según san Marcos 1, 14-20
Cuando arrestaron a Juan, Jesús se marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios. Decía:
—«Se ha cumplido el plazo, está cerca el reino de Dios: convertíos y creed en el Evangelio».
Pasando junto al lago de Galilea, vio a Simón y a su hermano Andrés, que eran pescadores y estaban echando el copo en el lago.
Jesús les dijo:
—«Venid conmigo y os haré pescadores de hombres».
Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.
Un poco más adelante vio a Santiago, hijo de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca repasando las redes. Los llamó, dejaron a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros y se marcharon con él.
Palabra del Señor.
Lecturas del Leccionario V para el mes de octubre
1 de octubre: Santa Teresa del Niño Jesús
2 de octubre: Santos Ángeles Custodios
3 de octubre: San Francisco de Borja
4 de octubre: San Francisco de Asís
5 de octubre: Témporas de acción de gracias y de petición (o si se celebra un solo día)
Si las Témporas se celebran en tres días:
6 de octubre: San Bruno
7 de octubre: Nuestra Señora, la Virgen del Rosario
9 de octubre: San Dionisio y compañeros
9 de octubre: San Juan Leonardi
10 de octubre: Santo Tomás de Villanueva
11 de octubre: Santa Soledad Torres Acosta
12 de octubre: Nuestra Señora del Pilar
14 de octubre: San Calixto I
15 de octubre: Santa Teresa de Jesús
16 de octubre: Santa Eduvigis
16 de octubre: Santa Margarita María de Alacoque
17 de octubre: San Ignacio de Antioquía
18 de octubre: San Lucas
19 de octubre: San Juan de Brébeuf, san Isaac Jogues y compañeros
19 de octubre: San Pablo de la Cruz
23 de octubre: San Juan de Capistrano
24 de octubre: San Antonio María Claret
28 de octubre: San Simón y san Judas